Al principio de la ocupación de Alemania por parte de los Aliados, en 1945, se presentó ante el general francés Jean de Lattre de Tassigny nada menos que el ex Príncipe Heredero de Alemania y de Prusia, Guillermo von Hohenzollern, hijo del difunto Emperador Guillermo II. Gracias a la mediación de un oficial francés oriundo de Alsacia, el Kronprinz Guillermo solicitó una entrevista con el General de Lattre de Tassigny para rogarle que le proporcionase a él y a su amante, los medios para asegurar su tren de vida y confort e interviniese ante los Soviéticos para impedir que éstos destruyeran sus propiedades situadas en Prusia. El general le replicó entonces, y al momento, que Alemania estaba en ruinas, que millones de sus conciudadanos pasaban un hambre atroz o morían luchando en condiciones atroces, haciéndole entender que sus "problemillas" personales no eran en absoluto prioritarios para el Ejército Francés, y le despidió soltándole:
-"¡Sois lamentable, Señor, lamentable!"
Anécdota de: Guillermo, Príncipe Hdo. de Alemania y de Prusia (1882-1951) y del General Jean de Lattre de Tassigny (1889-1952).
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